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¿NOS ESTAMOS EXCEDIENDO CON LOS REGALOS DE NAVIDAD?

¿Cuál es el motivo por el que, en estos tiempos, algunas familias hacen demasiados regalos a sus hijos?

Si le preguntaras a tu hijo o hija qué es lo que le gusta de la época decembrina, seguramente te diría que poner el arbolito de Navidad, cantar villancicos, el festival navideño del colegio, las vacaciones y, sin duda, hacerle su carta a Santa para recibir algún juguete o juego que desea mucho.

No está mal recibir regalos, por supuesto, pero de pronto los peques no reciben uno, dos, tres o cuatro, que ya empieza a ser un número considerable, ¡sino muchísimos más! Ahora, a muchos de nuestros chicos los estamos saturando de regalos, es decir, los estamos convirtiendo en niños hiperregalados. No sé si llegan a jugar con todos los juguetes o a usar los obsequios que reciben, lo que sí es notorio es hay un consumo excesivo en estas fechas.

¿POR QUÉ REGALAMOS –TANTO– A NUESTROS HIJOS?

Estas fechas son la ocasión perfecta para regalar, lo que es parte de la tradición y es maravilloso, pero a veces lo hacemos sin límites, rayando en el exceso. Para la psicóloga clínica y psicoterapeuta infantil y de adolescentes, Xóchitl González Muñoz @psico_infantil, hay varias razones que lo podrán explicar: “por un lado, puede tratarse de la necesidad de compensar, a partir de regalos materiales, algunas carencias emocionales, de convivencia y familiares. Y por otro, y es algo que veo en consulta, es que mamás y papás regalan de manera desmedida por sus propias carencias, como una necesidad de compensar o regalar a la ‘niña o niño herido’, como una evocación a esa infancia, que quizás no fue sana ni feliz”.

Junto con ello, es innegable la influencia de la cultura, así como los usos y costumbres actuales. “Antes se nos vendía en catálogos o anuncios y ahora es una persecución constante en redes sociales”, explica la experta en infancia y adolescencia. Esto genera la creencia de que necesitamos lo que estamos viendo que los influencers postean, y no sólo respecto a regalos, sino de todo lo que ellos dicen o hacen, pero se acentúa en este, que es un momento emocional especial.

Estas razones son los potenciadores para perder objetividad sobre qué es lo adecuado, lo sano, lo suficiente y lo necesario, y se responde desde la carencia emocional, tratando de llenar estos vacíos desde diferentes lugares, “¡como si un objeto material pudiera llenar estos vacíos!”, enfatiza la psicóloga clínica.

La época navideña, en estos tiempos, como bien señala Xóchitl González Muñoz, “es un bombazo entre el algoritmo queriéndonos vender algo y las carencias emocionales, lo que convierte a algunos papás y mamás en hiperregaladores”, y agrega que muchos adultos toman a la Navidad como una época para “hacer notar que su familia no está rota o tapar su ausencia con los niños, aunque eso duela, entonces, lo que queda es regalar. Y regalar en exceso”.

¿LIMITAR EL NÚMERO?

Seguramente habrás escuchado la regla de “los 4 regalos”, que básicamente aconseja darle a los niños:

1. Algo que se puedan poner (zapatos, ropa, complementos).
2. Algo para leer.
3. Algo que los niños realmente deseen.
4. Algo que realmente necesiten.

Sin embargo, a decir de la terapeuta González Muñoz, más que un número, aunque el hecho es ‘cuantitativo’, escoger cuántos regalos debe hacerse desde lo ‘cualitativo’, es decir, reflexionando desde dónde se está haciendo el regalo, para qué hacerlo, qué emociones va a generar e, incluso, si ello va a llevar a quien lo recibe a consumos no saludables.

Este análisis es muy personal, por lo que la especialista recomienda, de manera general, hacerse estas preguntas antes de hacer las compras:

• ¿Qué le quiero regalar a mi hijo/a?
• ¿Es para mi hijo/a el regalo o para mi niño/a interno/a herido/a?
• ¿Cuál es mi objetivo de regalar?
• ¿Para qué lo estoy haciendo?
• ¿Para qué me alcanza?

Es conveniente hacer conciencia y “no dejarnos atrapar por el algoritmo, ni buscar llenar vacíos y carencias. Lo que verdaderamente va a marcar a las infancias es el tiempo de calidad que pasan sus padres con ellos”, agrega.

Cuando a alguna persona le resulte más fácil comprar un juguete caro que darle tiempo de calidad a sus hijos, claramente estamos viendo una desproporción y/o necesidad de compensación. ¿Hacia allá quisiéramos inclinar la balanza? ¿O convertir a nuestros hijos en niños hiperregalados?

¿QUÉ REGALARLES?

Una vez hecha esta reflexión, sin duda es importante que las infancias se sepan escuchadas y que ellos puedan decidir qué pedir a Santa y a los Reyes. Para ello hay que seguir, incluso, pautas de seguridad y buscar alternativas a las pantallas, tan buscadas en los últimos tiempos, porque es necesario que disfruten también de otras actividades que no involucren a la tecnología, sugiere la Academia Americana de Pediatría, y hace una lista de 10 obsequios que podrías considerar:

• Juguetes tradicionales.
• Juegos de mesa, cartas y basados en preguntas para jugar en familia.
• Disfraces y otros accesorios para vestirse que les permitan usar su imaginación y fomentar la creatividad.
• Juguetes de construcción, bloques y artesanías. 
• Juguetes para jugar al aire libre para mantenerlos activos y en movimiento.
• Rompecabezas.
• Provisiones o elementos para cocinar. 
• Crayolas, lápices de colores, libros para colorear y otros útiles para escribir.
• Boletos o entradas para espectáculos diseñados para niños, eventos deportivos y otras funciones.

La sugerencia de la psicoterapeuta Xóchitl González Muñoz es que se haga una inversión en regalos y experiencias que impacten en los vínculos, en generar momentos de plática familiar y no en juguetes que lo hagan todo solos. Es importante también no exponerlos a malas experiencias como traerles carbón o amenazar con que Santa los está observando. “Si se pretende hacer eso, entonces mejor no hay que regalar”, agrega.

NO FOMENTEMOS EL CONSUMISMO

El efecto que generan las cosas materiales puede dar alegría y emociones de mucho movimiento y fascinación. Se fija la atención en el objeto y la emoción es muy intensa, llega intensa y se va intensa. Pero esto no es una forma para generar procesos emocionales profundos y sanos, explica la experta Xóchitl González Muñoz. 

Esto puede generar hábitos de consumo desproporcionados en los niños, además de hacerles pensar que regalando se demuestra el afecto. Por si fuera poco, “el exceso de regalos puede derivar en compulsiones y adicciones porque, al recibirlos, hay una generación de dopamina en el cerebro, un neurotransmisor responsable de que sintamos placer y felicidad. Y el cerebro se va a entrenando o acostumbrando a querer tener emociones rápidas e intensas, pero que al final son volátiles. Las consecuencias pueden ser problemas de salud metal y conductas como baja tolerancia a la frustración, consumismo, pérdida de la ilusión, entre otros.

La felicidad o la calma de nuestros peques no reside en el número de regalos: la contención y el acompañamiento de los padres a los hijos reside en el tiempo de calidad, en esta época y todos los días.

Por ello es importante identificar si, al regalar, lo hacemos desde nuestra herida de infancia o si lo estamos haciendo para compensar, sugiere la especialista Xóchitl González Muñoz. Apostemos por experiencias de vinculación familiar que aporten comunicación y emociones placenteras que sean disparadoras de prácticas de buen trato y no dejar que esa experiencia emocional placentera se reduzca a lo material, finaliza la psicóloga clínica. 

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¡TU HIJO YA TIENE CUATRO AÑOS! SIGUE DE CERCA SU DESARROLLO

Cada etapa en la vida de tu niña o niño es una nueva experiencia. Con 4 años de edad, tu hijo enfrentará retos y desafíos todos los días. 

Como mamá debes fomentar que siga aprendiendo y creciendo, a través del juego y de pequeñas responsabilidades que ya le puedes dar, pues ganará confianza en sí mismo. Permite que sea más autónomo. Quizá quiera escoger qué ropa ponerse para visitar a los abuelos o qué vaso elegir para beber su leche.

El niño de 4 años controla esfínteres, aunque puede tener accidentes ocasionales, tanto de día como de noche. ¿Qué otros cambios puedes observar en los también llamados preescolares?

TALLA Y PESO

El crecimiento de tu peque ya no es tan veloz. Sin embargo, es importante que el pediatra siga haciendo sus revisiones para saber si hay un desarrollo físico y neurológico adecuados para la edad que tiene.

Si no es una niña o niño que se enferme, se recomienda que los lleves al menos a su revisión médica una vez al año. El pediatra va a escuchar su corazón y sus pulmones. Va a checar cómo está su audición y visión, y revisar que no tenga pie plano, entre otros aspectos.

También lo va a medir y a pesar. Recuerda que estas medidas ayudan a los médicos a conocer si hay un crecimiento y desarrollo adecuados. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), estas son las tallas y pesos estándar:

Niñas: Peso 16.1 kg Talla: 102.7 cm

Niños: Peso 16.3 kg Talla: 103.3 cm

¿Y LAS VACUNAS?

Un tema doloroso para muchos chiquitines, pero es importante que le apliquen los refuerzos de las vacunas que le tocan a los 4 años, que son:

• Vacuna contra la influenza
• Vacuna contra el COVID19
• Refuerzo DPT (Difteria, tosferina y tétanos)

ALIMENTACIÓN

No te preocupes si tu peque no quiere comer mucho. Por lo general, a los cuatro años de edad, igual que a los 3 años, los niños no tienen mucha hambre debido a que su tasa de crecimiento es más lenta.

Por eso, “si tu hijo se niega a comer, es probable que no tenga hambre. De hecho, alentar a un niño a comer a menudo significa darle calorías adicionales innecesarias”, de acuerdo con la Academia Americana de Pediatría.

La alimentación de tu niña y niño debe estar basada en el Plato del Bien Comer, el cual incluye una variedad de alimentos, como carne, pescado, frutas, verduras y cereales.

• Enseña hábitos de alimentación saludables.
• Ofrece tres comidas y dos colaciones en el día.
• Establece horarios para los alimentos.
• Procura comer en familia.
• Evita que tu peque vea pantallas mientras come.

DESARROLLO PSICOMOTOR

Los peques a esta edad controlan mejor su cuerpo y tiene mayor agilidad. Hay más coordinación y equilibro en todos sus movimientos. Esto le permitirá:

• Saltar en un pie sin dificultad.
• Sostenerse en un pie durante cinco segundos.
• Armar rompecabezas.
• Subir escaleras rápidamente.
• Patear con fuerza.
• Correr y cambiar de dirección (sin detenerse).
• Reconocer la lateralidad en sí mismo (izquierda-derecha).

Asimismo, debido a que su motricidad es cada vez más fina, sus movimientos son más precisos y es muy probable que ya pueda:

• Agarrar un crayón o lápiz (entre los dedos y el pulgar).
• Escribir su nombre.
• Servirse comida, por ejemplo, cereal (con supervisión de un adulto).
• Recortar respetando líneas verticales, horizontales y curvas.
• Desabotonar alguna prenda de vestir.
• Utilizar más una mano que otra para comer y/o escribir.

DESARROLLO COGNITIVO

Tu niña o niño comprende mejor lo que pasa alrededor. Su pregunta favorita es: ¿por qué?

• Aprende a esperar su turno.
• Identifica emociones como la alegría y la tristeza.
• Como coloquialmente se dice, es una “esponjita” que absorbe todo lo que ve y escucha. Ahora tu hijo se siente niño grande y puede:
• Expresar mejor sus necesidades y emociones. Eso sí, sigue aprendiendo en cómo regularse, por lo que un berrinche de vez en cuando es normal y parte de su desarrollo.
• A los peques de 4 años les gusta jugar todo el tiempo. Hay quienes tienen amigos imaginarios.
• Juega a que es bombera, doctora, chef o profesor. Su pasatiempo es ver caricaturas o sus películas favoritas, una y otra vez.
• Aprende diálogos y los repetirá mientras juega. También le gusta cantar y mover su cuerpo al son que le toquen.
• Prefiere jugar más con amigos, que solo, y es capaz de clasificar objetos por su tamaño, forma o color.

LENGUAJE

¿Te has dado cuenta de que tu peque se ha vuelto más parlanchín? Los niños incrementan su vocabulario cuando ingresan al kínder y aprenden muchas palabras cuando en casa tienen el hábito de la lectura.

Otra forma en la que puedes estimular el desarrollo del lenguaje de tu niña o niño es a través de la observación y participación en actividades cotidianas en el hogar y en la escuela. “Mientras más activa sea, habrá más probabilidades de que la apropiación del lenguaje sea exitosa”, señala Lizbeth Vega Pérez, académica de la Facultad de Psicología de la Universidad Autónoma de México (UNAM).

Un preescolar a esta edad puede tener en su vocabulario entre 1,500 y 1,600 palabras. Eso no significa que las exprese todas, sino que las conoce y entiende cuando escucha.

• Dice oraciones de 4 frases o más
• Cuenta alguna actividad que realizó en la escuela
• Utiliza los verbos de manera correcta
• Responde a preguntas sencillas
• Tiene buena pronunciación

¿QUÉ PUEDE HACER UNA NIÑA O NIÑO DE 4 AÑOS?

Tu peque puede hacer muchas con apoyo, tales, como:

• Guardar sus juguetes y su ropa
• Vestirse solo
• Ayudarte a poner la mesa
• Elegir su ropa
• Lavarse las manos
• Cepillarse los dientes

SUEÑO Y MIEDOS

Ahora que tu peque es más grande es probable que ya no tome siesta. Y lo esperado es que duerma entre 10 y 13 horas por la noche. También es común que aparezcan los terrores nocturnos debido a que todavía le cuesta trabajo distinguir entre la realidad y la ficción.

Algunos temores son parte del desarrollo de los preescolares. No obstante, es importante que supervises lo que está viendo televisión, tableta o teléfono. Y que dos horas antes de acostarse no se exponga a pantallas.

Para que tu peque tenga un sueño reparador te sugerimos tener una rutina para dormir, la cual puede incluir leer un cuento. Así como dejar una lamparita encendida durante la noche para que se sienta más tranquilo y seguro.

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MUSEOS PARA VISITAR EN VACACIONES

¿Necesitas ideas para pasar en familia una salida divertida? Conoce estos museos y vive con tus pequeños nuevas experiencias, ¡para aprender en familia!

Visitar un museo en familia es una excelente opción para fomentar la sensibilidad e inteligencia de tu niña o niño. Te sugerimos elegir uno en función de los gustos e intereses de tu hijo, sobre todo, si es la primera vez que lo visita.

UNIVERSUM

El Museo de las Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México, mejor conocido como UNIVERSUM, es pionero -en su tipo- en Latinoamérica. Hablar de este recinto es hablar de modernidad y de una forma lúdica de divulgar la ciencia.

Este museo fascina a chicos y grandes por ser un lugar de encuentro interactivo, experimental, creativo e inclusivo, en donde se viven experiencias museológicas y educativas de impacto sensorial, educativo y cultural.

Desde sus inicios, este museo ha tenido como finalidad promover la cultura científica, facilitar el aprendizaje, propiciar el pensamiento crítico y la reflexión. Universum está ubicado en la Ciudad de México, dentro de Ciudad Universitaria.

www.universum.unam.mx

NIÑOS CONARTE

Es un espacio lúdico, de sensibilización y aprendizaje para niños y padres de familia que tiene como fin fomentar la lectura y la educación artística. Está localizado en el Parque Fundidora, en Nuevo León, Monterrey.

La biblioteca cuenta con un acervo de más de 4 mil 900 títulos sobre literatura infantil, dedicados a las diferentes edades y habilidades lectoras de los niños. Deja que tu peque dé rienda suelta a su imaginación, que cree y explore con todos sus sentidos.

conarte.org.mx

MUSEO MEXICANO DEL AXOLOTE (MUMAX)

Debido a su aparición en videojuegos como Fortnite, Roblox y Minecraft, el ajolote mexicano se ha vuelto popular y ha logrado que tanto niños como adultos quieran saber más de este anfibio que se encuentra en peligro de extinción.

Esta salamandra ha sorprendido hasta a los científicos, pues es una especie que permanece en su estado larval hasta la edad adulta.

Si quieres que tus hijos tomen conciencia sobre la conservación de esta especie, este museo es el lugar idóneo. Visítalo en Chignahuapan, Puebla.

www.facebook.com/casadelaxolote

EL GRAN MUSEO DEL MUNDO MAYA DE MÉRIDA

Los mayas son una cultura muy importante para México y el mundo. Y que tus hijos puedan conocer más sobre sus construcciones, dioses, idioma, entre otros temas, los acercará a la historia y transformaciones que ha tenido la humanidad a través de los años.

Este museo va a gustarles mucho porque es interactivo, tu niña o niño podrá explorar y conocer más sobre esta cultura, a través de fichas que despliegan información. Hay salas de inmersión y dioramas, que son representaciones tridimensionales de una escena o situación.

El museo cuenta con una gran pantalla Mayamax para disfrutar de producciones cinematográficas, documentales y cortometrajes, con imagen y sonido de alta definición.

https://www.granmuseodelmundomaya.com.mx/

MUSEO INTERACTIVO DE ECONOMÍA (MIDE)

El MIDE es uno de los imperdibles. Se trata del primer museo interactivo de economía del mundo. El museo está dedicado a la economía, pero también a las finanzas y el desarrollo sustentable.

Aquí tus peques aprenderán que todas las personas somos parte de la economía de una manera divertida. Tomarán conciencia sobre la importancia de cómo gastamos el dinero y de qué forma podríamos ahorrar.

Pero también podrán conocer cómo se hacen los billetes que usamos todos los días. El MIDE está ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México.

www.mide.org.mx

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VALORES NAVIDEÑOS

Son tan importantes como otros conocimientos en su desarrollo, y esta época es perfecta para aprenderlos.

GRATITUD

No existe mejor muestra de gratitud por parte de tu niño que un beso, abrazo o sonrisa. Enséñalo a demostrar este tipo de acciones, reconociendo, por ejemplo, su ayuda o apoyo al colocar los adornos navideños.

CREATIVIDAD

Tu hijo debe ser estimulado para llevar al máximo su creatividad, elemento clave en su desarrollo. Junto a tu hijo crea tarjetas o cartas navideñas para toda la familia, o bien representen una pequeña obra de teatro frente a los invitados.

RESPETO

Para que tu pequeño reconozca el valor del respeto, debe aceptar y comprender a los miembros de su familia (padres, hermanos, primos hermanos, tíos, abuelos, padrinos, etcétera). Por ende, evita realizar constantes comentarios negativos hacia otras personas.

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